La ornamentación de la capilla es bastante simple, su exterior se destaca por el rojo colonial y al interior los muros blancos contrastan con los tijerales de pino al natural y su piso de madera.
La nave es bastante pequeña y no hay espacio para altares devocionales, sin embargo igual se ubica un altar cerca de la entrada con la imagen de Cristo crucificado, San José y la Virgen María hacia los costados, al lado de San José una figura de la Inmaculada Concepción y una pequeña imagen de San Expedito ubicada a los pies de Jesús.
Los vanos de las ventanas también son utilizados como altares, con diversas figuras en formato pequeño dedicadas a varios Santos. Además, se puede apreciar en los muros una serie de cuadros pequeños tallados en madera que representan el Vía Crucis.
El retablo del Altar Mayor está conformado por dos grandes columnas y está presidido por la Virgen de Nuestra Señora de la Merced, a los costados se ubican dos ventanas cuyos vanos son aprovechados como parte del retablo y en ellos se encuentran las figuras de San Ramón Nonato y San Pedro Nolasco. El retablo es blanco con algunos detalles en color dorado y carece de frontón.